Porque mi pueblo respira
el sueño de un mañana
esta historia reclama
la libertad y la justicia
Hombres jíbaros y urbanos
damas de la casas y niños
lo que canto con cariño
lo brindo como hermano.
Y bendito el desengaño
si es puro y sin la ira
del que la piedra tira
y esconde la historia
vanamente y sin gloria
porque mi pueblo respira.
Respira con la conciencia
en sus momentos recios
porque mi pueblo no es necio
ni miope a la indecencia.
Y es su mágica esencia
cimarrona desde el alma
mas sabe quien mas ama
sin huir de su destino
y creando en el camino
el sueño de un mañana.
Y sueño lo que soñaron
desde el Cerro Maravilla
resucitando la semilla
que los mártires sembraron.
Y auque los viles trataron
de esconder mi proclama
la verdad hoy me llama
a denunciar los asesinos
con permiso de lo divino
esta historia reclama.
Y nos reclama volver
al veinticinco de julio
fecha en que el infortunio
nos obliga a renacer.
Pero de nada ha de valer
un relato sin la noticia
de que el olvidar nos vicia
en dóciles corderitos
escucha mi Puerto Rico
la libertad y la justicia.